Elegir saber
Si vivir para los humanos es elegir, hay una elección vital para todos nosotros: elegir saber. En todos los ámbitos de la
vida, nuestra responsabilidad es elegir saber. Esta es siempre nuestra opción
más inteligente.
Pero claro, elegir saber también es una opción
muy exigente, así que en demasiadas ocasiones nos la ahorramos. Vivimos sin elegir saber
qué le pasa a nuestro cuerpo, o cómo nos sentimos, qué estamos haciendo cuando elegimos un estilo de vida que no nos conviene...
Vivimos sin elegir saber qué
pasa con nuestras relaciones, qué pasa con nuestra pareja, qué pasa con
nosotros en relación a ella; vivimos sin elegir saber qué pasa con nuestros
hijos, quiénes son y cómo se sienten, vivimos sin elegir saber quiénes somos
nosotros, qué queremos y qué nos conviene.
Vivimos sin elegir saber
cuáles son nuestras virtudes, cuáles nuestros puntos fuertes, sin elegir saber a qué nos debemos, a qué normas queremos ajustarnos y a cuáles no; somos como esos jefes que no salen de su despacho y toman decisiones sin tener ni idea de lo que pasa fuera de él, allá en la obra. Y eso es lo que tenemos que descubrir, qué es lo que está pasando en todos los ámbitos importantes de nuestra vida.
Si queremos una vida que nos
guste, una vida a nuestra medida, si deseamos plenitud y felicidad, es hora de
que empecemos a elegir saber. Nos va la vida en ello, la buena vida.
Un abrazo, compañer@s caminantes
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